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Educando niños narcisistas


Desde hace un tiempo, reflexiono muchas veces sobre la sociedad en la que están creciendo mis hijas. Y me da la sensación de que es una sociedad cada vez más enferma. Los trastornos mentales son cada vez más frecuentes y la pérdida de algunos valores universales, preocupante.
La forma cómo educamos a nuestros hijos tiene mucha relación con la sociedad en la que vivimos y con la que inconscientemente estamos construyendo para el mañana.
Mi contacto diario con los niños y con las familias, hace que vea conductas que hace tan solo unos años eran menos habituales y que cada vez están más instauradas. Niños que van a su libre albedrío, sin límites, sin adultos que digan “hasta aquí”, sin modelos que sirvan de referentes, con exigencias totalmente desalineadas.
Por otro lado en los colegios y en comunidades educativas me temo que las noticias tampoco son buenas. Padres que protestan con absolutamente todo lo que tiene que ver con sus hijos. Que pretenden echar a otro niño de la clase de su hijo o directamente del colegio porque a los 5 años de edad no se sabe comportar. O que luchan por cambiar el horario de todo un grupo de extraescolar para que el grupo se adapte a las necesidades u horarios de su hijo. Eso ya sin contar con algunos comentarios lamentables que se oyen en los campos de fútbol o de otros deportes donde compiten los niños.

Los narcisistas

La personalidad narcisista nace, pero también “se hace” en función de la educación recibida. Ya en la adolescencia puede muestrar sus rasgos.
Los niños muy pequeños son narcisistas por definición y gastan todas sus energías en satisfacer sus necesidades. Con el crecimiento y la maduración cognitiva, van advirtiendo que no están solos en este mundo y que las necesidades y los anhelos de los demás también cuentan.
La persona narcisista tiene una imagen construida de sí misma de grandeza y de superioridad, le cuesta aceptar las críticas, tiene baja tolerancia a la frustración y necesita protagonismo y admiración. No acepta de buen grado un no por respuesta y puede reaccionar con agresividad.

Educando narcisistas

Los padres queremos lo mejor para nuestros hijos y una de las cosas que intentamos conseguir es que tengan una buena autoestima. El límite entre generar autoestima y criar niños narcisistas puede ser difuso. La diferencia no obstante es clara: la persona con una buena y sana autoestima está satisfecha con ella misma. La persona narcisista se siente superior, a pesar de que puede tener en realidad una baja autoestima.
Diciendo a los hijos que son siempre “los mejores”, compararlos con otros que lo hacen peor, presumir siempre de ellos o defenderlos “a toda costa”, pueden originar esta construcción de la personalidad, que en la que la vida adulta le va a llevar a buscar siempre ese protagonismo y admiración.
Cuando les hacemos protagonistas de forma repetida celebrando un cumpleaños 3 ó 4 veces o haciéndoles fotos de forma continua para compartirlas en nuestras redes diciendo lo guapos que son también fomentamos el narcisismo de nuestros hijos.
En la adolescencia, ellos mismos buscan la aprobación de los demás en las redes sociales. El egocentrismo guía para colgar una “selfie” y esperar los rápidos “likes” y comentarios de los amigos.

¿Cómo cuidar su autoestima sin originar niños narcisistas?

Un estudio hecho en la Universidad de Amsterdam por Eddie Brummelman con varios cientos de niños y de sus familias, que fueron seguidas durante unos meses, muestra la relación entre las valoraciones de los padres (del tipo “mi hijo es el mejor”) con el desarrollo de la personalidad narcisista de sus hijos. Sentirse superiores no indica sentirse necesariamente satisfechos consigo mismo (de hecho a veces, más bien lo contrario).
El autor determina que para construir una sana autoestima en nuestros hijos tan solo necesitamos crear un hogar donde se sientan queridos y valorados siendo como son -y esto incluye no ser la mayoría de veces los mejores-.

El futuro

La generación de los millenials, que incluye a las personas nacidas desde los años 80 a los primeros años 2000, ha sido acusada de ser la generación más narcisista de la historia.
Me temo que los que vienen detrás van a superar a sus antecesores con creces. Y me pregunto cuántas parejas van a poder mantener una relación y una convivencia estables en el futuro…


Tomado de : https://www.dra-amalia-arce.com/

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